En cualquier tipo de relación se dan diferentes fases, al inicio unen los aspectos en común, luego descubrimos las diferencias, al principio no importan las diferencias pero luego resultan ser un problema, a partir de este momento, el ideal que nos hemos formado se rompe, a veces cuesta ver el aspecto positivo y la aceptación resulta difícil. Aceptación no significa mantener una relación, se trata de comprender…
Una de las cosas que creo que son necesarias para que una relación se mantenga activa, es el constante fluir y eso solo se da cuando hay algo que compartir, cuando una relación deja de aportarnos algo que necesitamos no tiene sentido mantenerla y perdemos el interés. Nadie tiene la culpa, en un momento de la relación estas en la corriente, avanzando, y sin darte cuenta te ves estancado viviendo de los recuerdos y con menos percepción del presente. Quizás entonces la soledad te invade, y que mejor que escucharla, y en la soledad encontrarte… y se vuelve a la corriente, la vida da muchas vueltas…
Es bien sabido que las relaciones en pareja suelen ser las más difíciles, posiblemente porque nos relacionamos con la personalidad y el ideal que nos hemos formado, en ocasiones no somos capaces de ver nuestros errores y no aceptamos que nadie nos lo diga, en realidad nos enamoramos del alma, pero con el tiempo, dejamos de ver tan profundamente y entonces solo vemos las cosas negativas. Esta tendencia negativa solo es miedo a romper una relación, nos quejamos, quejamos y quejamos, pero ahí seguimos… ¿y así que conseguimos? Hablar mal del tu pareja, pensar mal de ella no es sano para las relaciones. Con quien tenemos que hablar es con la propia pareja, con nadie más, y si no hay compensación, no hay conexión….
A veces mantenemos relaciones que no nos convienen porque el ser humano se deja engañar fácilmente y cae una y otra vez en el mismo error.
Las relaciones pueden ser física, mental, emocional, astral… familiares, de amistad, en pareja, laborales… Los lazos que unen este tipo de relaciones pueden ser de muchas maneras, a veces nos atan con fuerza, otras veces no, en ocasiones olvidamos, en otras reencontramos, algunas son constantes, o inolvidables y únicas.
Cuando las diferencias entre las personas son muy grandes, solo se logra mantener la relación cuando hay AMOR. Pero no confundamos amor, con otra cosa, el amor podríamos decir que es lo que nos conecta a esa persona, no la razón por la que estamos con esa persona. De hecho, el amor es muy simple, si tu le preguntas a una persona porque se relaciona con otra, todo lo que te diga será falso, palabras que sirven para justificar la verdadera causa de porque dos o mas personas están conectadas íntimamente. El amor no atiende a razones, el amor surge y la conexión aparece.
Una de las cosas que creo que son necesarias para que una relación se mantenga activa, es el constante fluir y eso solo se da cuando hay algo que compartir, cuando una relación deja de aportarnos algo que necesitamos no tiene sentido mantenerla y perdemos el interés. Nadie tiene la culpa, en un momento de la relación estas en la corriente, avanzando, y sin darte cuenta te ves estancado viviendo de los recuerdos y con menos percepción del presente. Quizás entonces la soledad te invade, y que mejor que escucharla, y en la soledad encontrarte… y se vuelve a la corriente, la vida da muchas vueltas…
Es bien sabido que las relaciones en pareja suelen ser las más difíciles, posiblemente porque nos relacionamos con la personalidad y el ideal que nos hemos formado, en ocasiones no somos capaces de ver nuestros errores y no aceptamos que nadie nos lo diga, en realidad nos enamoramos del alma, pero con el tiempo, dejamos de ver tan profundamente y entonces solo vemos las cosas negativas. Esta tendencia negativa solo es miedo a romper una relación, nos quejamos, quejamos y quejamos, pero ahí seguimos… ¿y así que conseguimos? Hablar mal del tu pareja, pensar mal de ella no es sano para las relaciones. Con quien tenemos que hablar es con la propia pareja, con nadie más, y si no hay compensación, no hay conexión….
A veces mantenemos relaciones que no nos convienen porque el ser humano se deja engañar fácilmente y cae una y otra vez en el mismo error.
Las relaciones pueden ser física, mental, emocional, astral… familiares, de amistad, en pareja, laborales… Los lazos que unen este tipo de relaciones pueden ser de muchas maneras, a veces nos atan con fuerza, otras veces no, en ocasiones olvidamos, en otras reencontramos, algunas son constantes, o inolvidables y únicas.
Cuando las diferencias entre las personas son muy grandes, solo se logra mantener la relación cuando hay AMOR. Pero no confundamos amor, con otra cosa, el amor podríamos decir que es lo que nos conecta a esa persona, no la razón por la que estamos con esa persona. De hecho, el amor es muy simple, si tu le preguntas a una persona porque se relaciona con otra, todo lo que te diga será falso, palabras que sirven para justificar la verdadera causa de porque dos o mas personas están conectadas íntimamente. El amor no atiende a razones, el amor surge y la conexión aparece.
Ana Mª Jiménez
